lunes, 25 de agosto de 2014

5 CANCIONES EN ESPAÑOL ALTAMENTE PATRIARCALES

Eviten estas canciones para conservar la salud emocional.

El desamor es una situación bastante desagradable. Es un dolor agudo en el estómago, una pérdida temporal de la autoestima, de la concentración, de la creatividad y de las habilidades sociales. 
Afortunadamente no dura para siempre y duraría menos si no fuera porque nuestra sociedad le echa de comer en abundancia a esa situación en forma de literatura, de películas, de mensajes televisivos y sobre todo por medio de la música. El desamor es un asunto que tampoco se libra del machismo y el patriarcado marcando los siguientes estereotipos: la mujer está incompleta sin el hombre y llorando por las esquinas y el hombre despechado ha confiado en una mujer mala. Estas canciones nunca plantean maneras sanas de plantear las relaciones humanas y condicionan toda una ideología que sigue enfrentando y alejando a los diferentes sexos. Yo digo que ya basta de trasmitir estos mensajes insanos. El primer paso es saber reconocerlos cuando los tenemos cerca, veamos cinco ejemplos:

1º La Bella Durmiente-Eres tú mi príncipe azul. Empezamos con una película de Disney que es, por excelencia, el brazo armado del patriarcado. La Bella Durmiente contiene el argumento más macabro de la historia del cine (y es para niños). Una chica que vive en el bosque y que sueña con la llegada de su príncipe azul. (Hasta ahí todo normal en Disney). Pero por un maleficio de otra mujer celosa y reprimida, (así es como caracteriza Disney a las mujeres de mediana edad con caracter), esta joven doncella vive dormida esperando a que la despierte un beso de amor verdadero. Sólo junto a un príncipe su vida tendrá sentido y podrá ser por fin una vida, lo demás es un trámite. Esto es sexismo, es violencia y es dominación y yo siempre me pregunto ¿Cuántos hombres pasaron por allí para besarla hasta que la dio con su amor verdadero? Prefiero que mi hija sea una bruja a que la bese todo el reino mientras duerme.

2º Malú. La espectacular voz de Malú es barrida rápidamente por la escoba del patriarcado por culpa de la mayoría de sus letras. Aparentemente una mujer con mucho carácter, que sin embargo insiste en cada disco en parecer una esclava del amor, completamente deprimida, sin autonomía, sin dar un puñetazo en la mesa y decidir dejar de sufrir por ese chico, mostrando una sumisión total desde canciones como “Toda” donde le propone a su pareja que haga con ella lo que quiera aunque su vida corra peligro, pasando por “ te regalo mi amor, te regalo mi vida” despojándose de toda ella, y ya directamente un “deshazte de mí”. El caso de Malú es preocupante, porque no estamos hablando de corridos mexicanos rurales ni baladas de los años cincuenta, se trata de una mujer que está en la lista de éxitos nacional cada cierto tiempo, contaminando a los jóvenes esta forma nociva de vivir el amor y las relaciones.

3ºAlejandro Fernández-Mátalas. Ahora si estamos hablando de corridos mexicanos. Superado el susto inicial de que este hombre esté haciendo apología de la violencia machista, nos damos cuenta de que no lo arregla intentando matarnos con una sobredosis de ternura en vez de con una daga, ya que nos define en la primera estrofa como “seres” y más tarde como “ingratas” alimentando mitos como el que nos posiciona como la fruta prohibida y la perdición de Adán, o los desastres que salieron de la Caja de Pandora. Este tipo de argumentos nos deja en un lugar inferior en el que sólo podríamos esperar perdón o caridad de los hombres, que tengan a bien querernos y mimarnos.

4º Amaral.Sin ti no soy nada”, “Cómo hablar”, “Te necesito”. En fin, no me voy a deprimir. Sólo quiero comentar acerca de Amaral, que nunca plantea una alternativa alegre a la soledad. Según estas letras una mujer debe preferir quedarse con un hombre que está visto que no la quiere, a estar sola, incompleta, muda, casi muerta.

5º Julio Iglesias. “Lo mejor de tu vida”. Su despecho y su falta de modestia le lleva a recordarle a la mujer en cuestión que su juventud, su virginidad, sus mejores años, se los llevó él como algo tangible dándole a entender que ahora ella es impura por haber tenido más relaciones sexuales con otro hombre que no fuera él y tratándola como un juguete roto que no posee nada de sí misma. Regodeándose en la odiosa idea de que las mujeres olemos a hierba (¿?) o que nuestra virginidad es pureza y nuestra vida sexual sana y activa nos debe desprestigiar.

Cuando uno está dolido puede llegar a creerse estas canciones pero lo que debemos pensar es que hay otra forma de tramitar los malentendidos tras la ruptura o el desengaño amoroso que no sea el antagonismo de los sexos ni el rencor perpetuo sino el consenso y el respeto. El respeto de dos personas que se han querido mucho durante mucho tiempo. En este sentido me comprometo a recopilar casos de canciones que vayan en esa dirección.


No he querido hacer sangre. Por desgracia no se libran grandes músicos que incluso hemos admirado como Joaquín Sabina o Maná. El problema es que muchas veces es intencionado y cuando no lo es, se trata de algo grabado a fuego en nuestra forma de relacionarnos que tenemos que advertir y corregir o al menos visualizarlo. A lo mejor hay muchos ejemplos que yo ni si quiera puedo ver porque estoy muy dentro del patriarcado. Eso sí que sería deprimente, como para escribir una canción.

martes, 8 de julio de 2014

En la estación

Hoy les voy a hablar de las estaciones de tren. Nunca antes hasta cumplir los 27 años hace unas semanas, había yo sentido tanto agobio en la estación de tren. Hasta ahora, solía sentarme tranquila a observar a la gente pasar agobiada con un equipaje impoluto, mientras me ponía a escribir mis reflexiones. A veces cogía algún ten, no digo yo que no, pero me bajaba a la media hora en otra estación y vuelta a la  rutina de la observación y la escritura.

Pero hace unas semanas todo cambió. La gente, en lugar de respetarme como había hecho hasta ahora empezó a quitarme espacio con sus maletas y a empujarme, como si quisieran obligarme a tomar la decisión de tomar algún tren. Pero es que encima, los trenes hacia los que me empujan ¡son horribles!, aunque parecen bonitos por fuera, pero por las ventanas no se parecen a lo que yo quiero. No les voy a mentir, en esos trenes que yo no quiero tomar se ve a gente muy feliz, otros no tanto, pero están masificados. De los 2000 trenes que pasan diariamente por esta estación de la que les hablo, los más masificados son unos diez, en los que todo el mundo insiste en apearse y obligan a los demás a que lo hagan.

Empezaré por hablarles del tren que a mí más me llama la atención, después de todo, es el tren que yo llamo: "emparejate ya... pero ya". A éste tren se suele empujar más a las mujeres que a los hombres. Es un tren donde pagas un pasaje para una pareja preferiblemente heterosexual y donde no importa tanto que el amor te invada como que la gente de la estación decida que es el momento de subirte. Entonces como te subes a este tren por presiones sociales y no por amor o cariño, se te empiezan a acabar los temas de conversación con tu pareja y tienes que buscar algo que te una a ella. Para ello este tren te da la posibilidad de enlazar con otros dos: "un bebé fortalezerá la relación" y el de "tengan una hipoteca en común o la letra de un coche".


Si se enlaza con el tren "Un bebé fortalezerá la relación", la mujer notará que también en este caso la presión sobre ella es mayor y la empujarán a este tren sobre todo las otras mujeres. No es solo un empujón figurativo sino también literal. Notarás el empujón cuando tus amigas con bebés no hablen de otra cosa que de cosas de bebés, es completamente normal, yo seguramente lo haría, pero no deja de ser una presión hacia el tren del bebé.Cómo sacarles los gases y qué marca de toallitas es más hidratante a la par que económica lo inundarán todo. Cuidado con el argumento del reloj biológico en este punto, porque es un elemento de persuasión más peligroso que el que usó el PP cuando dijo que no iba a subir el IVA. A veces no se nos enciende tanto el reloj biológico al llegar a los 30, como que culturalmente las mujeres de nuestro entorno no hablan de otra cosa y buscamos mecanismos, como siempre hacemos los humanos, para integrarnos.

La segunda opción con la que enlaza este tren es tener la hipoteca juntos o la letra del coche. Todo a nuestro alrededor, incluso estando sumidos en la crisis financiera y económica actual, nos estimula continuamente a que la felicidad es encadenar nuestro salario a un compromiso financiero AUNQUE SEA PARA TODA LA VIDA a cambio de cosas materiales. Siempre me he preguntado qué persona que me quiera me empujaría a mí a subir a este tren de la deuda eterna, de encadenarme a un lugar o de trabajar para pagarle a un banco intereses. Entonces miro a mi alrededor, y por suerte no veo a nadie que me quiera de verdad empujarme a ésto. Entienden que si algún día me hipoteco será por algo importante y probablemente no material y lo respetan. Procuraré que a mi pareja sólo me una el amor, así no tendré dudas en diferenciar si alguna vez se ha acabado o tenemos tantas otras cosas en común que no distinguimos el cariño y la felicidad de la seguridad de la costumbre.

Otro tren muy peligroso, que de no elegirlo voluntariamente puede ser para la persona como viajar por Mordor, es el de "fijo"; trabajo fijo, nómina fija, casa fija... No hay tren más tramposo que éste, porque te promete un viaje confortable, unas vistas agradables, una temperatura ideal... Pero cuando ya has visto dos estaciones da la vuelta y pasa por las mismas y así todo el trayecto. El psicólogo Rafael Santandreu, dice que la comodidad está sobre valorada, que es tras el esfuerzo incómodo o tras haber pasado frío que valoramos el descanso y el calor. Yo estoy de acuerdo.

El último tren del que quiero hablarles hoy es, como no, también más estresante para las mujeres y yo lo llamo: "Lucha contra la gravedad" ¡Este tren vuela! Pero no en un sentido chachi sino que está en otra realidad paralela, donde las mujeres después de parir le damos el niño a la matrona y ya estamos con nuestro entrenador personal o programamos nuestra cesárea para que el niño no nos deje la piel muy suelta, (a ver si va a parecer, que el niño estuvo nueve meses ahí). En este tren vives flipando desde los 15 años, porque se te explica que en la belleza física está la clave para volar, entonces empiezas a luchar contra la gravedad de todas las formas posibles y a sentirte mal contigo misma cuando empiezan a salir las arrugas de expresión o cuando los pechos se caen y la celulitis aparece en los muslos, entonces este tren que no quiere nada que se caiga te deja tirada en una estación llamada "eres inútil como mujer" y empiezas a lamentarte de no haber cogido otros trenes cuyas ventanas mostraran otras cosas, cosas imperecederas, cosas que la naturaleza nunca tira al suelo.

De modo que tras esta explicación quiero pedir un favor a las personas que empujan y atosigan en la estación:

POR MÁS QUE ME EMPUJEN Y ME ATOSIGUEN, YO SEGUIRÉ DECIDIENDO. 
POR MÁS QUE ARRINCONEN EN UNA ESQUINA DE LA ESTACIÓN YO SEGUIRÉ ELIGIENDO QUÉ TREN COGER Y DONDE BAJARME Y NUNCA CONSEGUIRÁN QUE ME ODIE POR HABERLO DECIDIDO ASÍ. POR MÁS QUE CREAN QUE SOY LA LOCA QUE SE QUEDA EN UNA ESQUINA ESCRIBIENDO GARABATOS, MI OPCIÓN DE QUEDARME A MIRAR LOS OTROS 1995 TRENES QUE PASAN ES TAN RESPETABLE COMO LA DE USTEDES.

A fin de cuentas, que cada uno elija como llegar a la última estación.

p.d. A mis paisanos canarios les digo que el ejemplo de la estación de guaguas no es válido porque aquí lo de los horarios nos lo tomamos con calma.







domingo, 4 de mayo de 2014

HUM820

HUM 820 es un relato que escribí como homenaje a muchas personas que conviven o han convivido conmigo en la facultad de Historia. Fue premiado con el segundo premio en el V Premio de relato corto sobre vida universitaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
El siguiente enlace es un repositorio digital de la Universidad donde pueden leer el relato completo en formato pdf: http://acceda.ulpgc.es/handle/10553/11625




¡GRACIAS POR LEERME, ME DA ALAS PARA SEGUIR!


martes, 22 de abril de 2014

"Para que el alma no muera" 23 de abril

Un libro es un objeto que no es poderoso per se. Un libro para un gato no es nada, bueno, para un gato todo es una cama. Pero un libro para un hámster, para un elefante o para una amapola no es nada. Y si lo es, no lo sabemos.
Esto coloca al libro en una posición de dependencia con respecto a las personas, ya que nosotros los creamos, los utilizamos y nosotros podemos destruirlos, quemarlos,prohibirlos... ¿Significa ésto que los libros son inofensivos? ¿Significa que las personas no dependemos de ellos? 
No y no. Un libro es el resultado de la ecuación compuesta por por la persona que lo lee (y sus circunstancias) y el libro y su contenido.


De esta forma, cada libro se comporta de manera diferente, dependiendo de las circunstancias contra las que impacte. Si aceptamos ésto, debemos admitir que no todos los libros son buenos, liberadores, pedagógicos y constructivos por el mero hecho de ser libros. Por ejemplo: el libro "Mi lucha" de Adolf Hitler, impactando contra las circunstancias mentales de un neofascista o un antisemita no es bueno, ni esperanzador ni mucho menos liberador. Por eso cuando les gritamos a los policías en las manifestaciones: "¡menos violencia y más leer libros!" Estaría bien especificarles cuáles sí y cuáles no y aun así estaríamos corriendo un riesgo. Porque la decisión de acercarse a un libro es personal y no en todas las personas produce el mismo efecto.

Y es que los libros tienen ese poder, de crear acciones, de ir más allá de sus propias páginas, de ser una extensión del mundo que no ocupa mucho espacio, no tanto como el que contiene. Se convierte en un sitio de la casa, un lugar en el que refugiarse, una ventana. Habla García Lorca, del destierro de Dostoyevski en Siberia. El escritor ruso le escribió a fu familia una carta en la que les rogaba "Enviadme libros para que mi alma no muera" Federico explicó así este deseo: Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua; pedía libros, es decir horizontes, es decir escaleras para subir a las cumbres del espíritu y del corazón, porque la agonía física, biológica, natural de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida”. 
Sería también Lorca que quien en la inauguración de la biblioteca de su pueblo natal Fuente de vaqueros, recitara un precioso discurso que bien parece un poema en prosa y un canto a la importancia de estos objetos que hoy homenajeamos: "Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría pan sino que pediría medio pan y un libro. Ataco violentamente a los que solo hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirse en máquinas al servicio del Estado". 

Dependemos de los libros porque aun no hemos inventado nada más poderoso para transformar mentes, sociedades, etapas históricas. El saber acumulado de la Humanidad aguarda en ellos para mostrarnos escaleras, horizontes, esperanza. En cualquier formato: electrónico, pdf, epub, de papel, de pergamino, encuadernado en oro, da igual eso no importa, lo de dentro es lo importante. Esa es la mejor metáfora que encierra la incógnita de la ecuación de un libro y eso nos hace a todos iguales.









viernes, 18 de abril de 2014

Sapiens lectores

Los tres días que tardé en leer Cien años de soledad los recuerdo como una duermevela de mucho calor y lluvia. Pienso en Macondo y veo un mundo amarillo, muy familiar como el recuerdo de unas vacaciones de verano de la infancia. Tuve la suerte de que un libro suyo cayera en mis manos y luego otro y otro. Sí, fui afortunada. Vi fotos de él en vida y pensé: Ahí está el genio. Le admiro en vida... ¿Y?

Es una característica propia de muchos sapiens necesitar decirles al resto constantemente: "¡EY! que yo me he dado cuenta de algo que ustedes no han visto".
Esto es lo que ha pasado en las redes sociales a raíz de la muerte del Maestro García Márquez. Por un lado, millones de personas sienten un pesar profundamente humano, por la pérdida de uno de los grandes de la literatura universal, pero por el otro, saltan estos sapiens inconformistas que demuestran su pesar, censurando a los que sin haberle leído nunca o a los que ayer se dieron cuenta de que existía ese ser excepcional , sintieron su muerte o cómo compartieron estados de Facebook o Twitter lamentándose. Y yo vi esto y miré al cielo y dije: ay, Gabriel, ¡no han entendido nada!

Porque lo que entiende este grupo de sapiens snobs es que los libros que han leído se miden en cuantías capitalistas con las que pisotear a los demás. Lo que entiende este grupo de sapiens venidos a más es que la cultura es un club exclusivo de socios al que sólo entra quien haya tenido la oportunidad en este mundo donde la cultura es clasista de acceder a más libros. Y el mensaje que envía este grupo de sapiens perniciosos es que ya los jóvenes que desde ayer decidieron acercarse al mundo amarillo de Macondo ya no llegan a tiempo. Pues yo les digo ¡SE EQUIVOCAN! Todos llegamos un poco tarde a incorporarnos a la cultura, desde la generación siguiente a las representaciones rupestres de la cueva de Altamira y una vida no nos va a dar para acercarnos a la milésima parte de este legado de la Humanidad. Son ustedes unos snobs elitistas y no les quiero en los altos cargos políticos que gestionan el acceso a la Cultura.

Yo celebro, con toda mi alma, que desde hoy haya más gente que conozca a Gabriel García Márquez, que se acerque a su obra, y que los jóvenes ayer en vez de compartir un selfie de Cristiano Ronaldo compartan D.E.P. Gabriel García Marquez. ME ENCANTA. Todos no accedemos al mismo tiempo a la cultura, todos no lo hacemos de la misma manera. Aún nos queda por saber mucho de gente que hoy no sabemos que existe. Qué maravilla.
Por último me gustaría recordarles, por si la ida de olla ya es total, que nadie tiene el monopolio del dolor por la pérdida de una persona del mundo y que cada uno lo manifiesta como quiere, le haya leído o no.

Seguramente García Márquez tenía un jardinero que no le había leído nunca, por el elitismo del acceso a la cultura y hoy está llorando más que el Coronel, que desde hoy ya sí no tiene quien le escriba.
Un abrazo, Gabriel. Te seguiré leyendo y mis hijos y mis nietos, ojalá, también.

miércoles, 16 de abril de 2014

Gestos con Historia

¡Hola a todos!
Estaré lo que queda de 2014 realizando un proyecto bloguero llamado Gestos con Historia. Una serie de doce entradas que pretenden recoger algunas situaciones de la Historia donde pequeños gestos en un momento dado, significaron un gran desafío para el orden establecido o un paso hacia algo mejor. A ver qué tal sale. Nos seguimos leyendo.
Gara.

jueves, 6 de marzo de 2014

Espero no echarte mucho de menos

Lo peor que te puede pasar es nacer sin quererlo, y lo mejor en ese caso es volverte loco. Nos hemos despertado con la noticia de la muerte de Leopoldo María Panero, era el mejor canalla que conocí de cerca, un canalla al que daban ganas de abrazar. Pero nadie lo hacía en Las Palmas por último. La ciudad se acostumbró a contar con él como atractivo cultural, como se cuenta con las esculturas de Chirino o con las fachadas de Vegueta, y éso sólo los que sabían que detrás de tanto humo había un gran poeta, el resto le metían en el mismo saco mental en que se mete a los mendigos, con ese desprecio...
Y hoy me sorprende leer y escuchar desde todos los rincones del país sentidos homenajes a su figura: especiales a toda página, entradas de blog como ésta o hasta locutores llorando en la radio a primera hora de la mañana, como si fuera un homenaje necesario que nos queríamos quitar de encima. Mientras se secaba bajo el sol de los bancos en Triana era un mueble de vapor, pero hoy que ya no molesta su incómoda presencia, vamos a ponernos tiernos. Qué gracia le haría todo ésto, es una pena que no lo pueda ver. "Yo que todo lo prostituí, aún puedo prostituir mi muerte y hacer de mi cadáver el último poema".





Hoy me gustaría hablarles de algunas de las personas que se dejaron impresionar por su vida y no por su muerte y a su manera le rindieron homenaje.

 Empezaré mencionando a Jaime Chávarri, que supo plasmar en una pantalla blanca y negra un paciente e impecable documento de la vida familiar de Leopoldo María, imprescindible para saber en qué contexto nace una mente tan llena de fantasmas y abismos como la suya.
El desencanto. Jaime Chávarri.

Otro documento audiovisual de incomparable valía sobre la vida de un ya entonces recluído en la Isla Panero, se lo debemos al cantante Enrique Bunbury, quien había admirado a los hermanos Panero desde su adolescencia y hasta llegó a afirmar que sus letras en solitario estaban inspiradas en ese halo terrible de sus poemas. Lo bueno de este documento es que en él, aún su locura le permite comunicarse con cierta facilidad y nos regala frases y momentos para la Historia.
Un día con Panero

El hotel Madrid por su parte, colaboró incansablemente a que el poeta ahogara su locura en alguna sustancia que no fuera más locura. Cuándo le decía a su camarero que me hablara de Panero solía decirme con una sonrisa: "Diré que es un mal cliente, pero también un reclamo. Me debe tantas cuentas... Lo tomaré como mi contribución a la literatura universal". También el Campus de Humanidades donde elegía pasar las horas era uno de los rincones de la ciudad donde se le podía encontrar. Quizá en algún tiempo, le pareció un lugar donde poder hablar de literatura con los alumnos de filología o de política con los de Historia. En sus últimos años de silencio seguía yendo a rodearse de colillas hasta que le prohibieron la entrada en el Campus.
Hotel Madrid. Las Palmas de Gran Canaria.


Los Bancos Triana . Sus principales puntos de apoyo en sus últimos años de vida. Desde allí era observado y observaba con esa inquietante mirada de los locos que dicen cosas que se parecen tanto a las verdades incómodas. Una mirada de reproche, descarada, como de haber visto algo que el resto desconocemos, como si fuera el único cuerdo de la Calle Triana.


Hay muchos más enlaces y documentos que elogian su obra, pero desde éstos yo les invito a que admiren a la tormentosa persona y que la odien también un poco, que es otra forma de admiración.

Que la tierra te sea leve

Llevabas tanto tiempo loco, que nadie te va a echar de menos más que hace dos semanas, pero vive Dios que fuiste una persona irrepetible, que nos diste tu talento, como los leones dan espectáculo a cambio de su cautividad. Si vieras las muestras de afecto en las redes sociales, de jóvenes y no tanto que han escalado un par de centímetros sobre su abismo gracias a alguno de tus versos... Igual de perdidos y desencantados que tú. Espero no echarte mucho de menos. Sit Tibi Terra Lebis.